Así usted este trabajando y los únicos en la familia que estaban de vacaciones eran sus hijos, volver a la rutina no es nada fácil. Con el colegio de los niños en pausa, puede dormir treinta minutos más, no tiene que llegar cansado a revisar tareas ni alistar uniformes ni loncheras.
Y si usted está en la universidad ni se diga. Que puede ser mejor que terminar el semestre y tener un par de meses para hacer nada. Pero como lo bueno dura poco, esta semana los estudiantes vuelven a las aulas y con el regreso a clases la dura y cruel realidad.
Entonces, la pregunta del millón es ¿cómo volver a la rutina después de vacaciones? Tómelo con calma y la última semana, antes de comenzar las clases, prepárese mentalmente para retomar los horarios de forma escalonada y hágalo.
No se quede con lo aburrido o las cosas que le generan pereza cuando piensa en volver a la rutina, mejor piense en positivo. Es decir, qué es lo bueno de volver a clases.
Si no sabe, le ayudamos parce, por ejemplo, que tuvo unos días para descansar y recargó baterías, que ya no tiene que buscar y pagarle a alguien para que le cuide a los niños, que entre más rápido terminen el colegio o la universidad, más rápido se gradúan, etc.
Y en el caso de los niños o jóvenes, ayúdeles a ver como regresar a clases significa reencontrarse con los amigos, conocer gente nueva, realizar diferentes actividades, jugar y aprender.
En vacaciones el cuerpo se acostumbra a descansar más, para que el cambio no sea tan brusco, la noche anterior váyase a la cama más temprano e intente quedarse dormido antes de lo usual.
Como dice la sabiduría popular, ante una realidad que no puede cambiar, lo mejor es ver el vaso medio lleno y no el medio vacío. El primer día será el más duro de todos.
Evítese un estrés innecesario. Desde la noche anterior deje todo listo, incluso los uniformes y su ropa. Levántense con tiempo, desayunen con calma y salgan a tiempo de la casa para no sufrir por el tráfico, pensando en que van a llegar tarde.
Si es posible, camino al colegio, la universidad o el trabajo, escuchen la música que les gusta, charlen mientras llegan al destino final y disfruten de lo que ven durante el trayecto.
Aunque le suene raro, aproveche para comenzar a planear las próximas vacaciones, pensar en eso será la motivación que usted y los suyos necesitan para estudiar y trabajar animados.
Lo que no debe hacer es decirle o mostrarle a los hijos, que volver a la rutina le da pereza, usted es el ejemplo que ellos siguen y por eso debe esforzarse para que despedir la vacaciones no se vuelva algo traumático, sino simplemente el cierre temporal de un ciclo, que unos meses después volverán vivir.
A lo bien parce, ánimo que en octubre es semana de receso.